El yodo es un micronutriente esencial para nuestra salud y el funcionamiento de la tiroides. En el caso de la mujer embarazada es aún más importante, ya que el desarrollo cerebral, crecimiento y regulación del metabolismo del niño está muy relacionado con las reservas de yodo con las que cuente la madre.
Si la madre tiene una carencia de yodo importante, y el hijo no recibe la cantidad de yodo necesaria, se pueden llegar a sufrir abortos de repetición o lesiones neurológicas muy graves e irreversibles en el feto como cretinismo (una forma de discapacidad intelectual y física), estrabismo, o déficit mental.
Por eso es tan importante incluir alimentos en tu dieta que garanticen la ingesta diaria de yodo recomendada por los profesionales: entre 150 a 200 microgramos de yodo al día, que en el caso de las mujeres embarazadas y lactantes será un poco mayor (entre 200 y 300 µg/día).
Al aumentar las necesidades de yodo durante el embarazo, su ingesta difícilmente se garantiza a través de la alimentación, por lo que se recomienda utilizar un complemento alimenticio que incluya yodo además de otros minerales y vitaminas que favorezcan el crecimiento del feto y la salud de la madre (como es el caso de PrenAvant).
Beneficios para tu hijo, pero también para ti:
El yodo es fundamental para garantizar el buen desarrollo del feto, pero recuerda que también es muy importante para la salud de la madre. Si a una persona le falta yodo en la dieta durante un periodo de tiempo prolongado podría dar lugar a un hipotiroidismo. Además, los hijos nacidos de mujeres hipotiroideas no tratadas, pueden presentar problemas de aprendizaje.