Con la llegada del año nuevo nos llenamos de un montón de propósitos para hacer nuestra vida más feliz y saludable. Entre ellos, no debe faltar el cuidado de nuestra salud tanto física como mental. La visita periódica al ginecólogo es necesaria para cumplir con estos propósitos y prevenir posibles enfermedades o resolver dudas.
En cambio, pese a ser tan esencial para la vida de una mujer, la visita al ginecólogo puede resultar incomoda y estresante. La falta de información hace que muchas veces no se aproveche al máximo la ayuda que la visita al consultorio del ginecólogo puede ofrecer.
Debes saber que el ginecólogo será un gran aliado desde el inicio de tu vida reproductiva, conocedor de la evolución de tus órganos reproductores y ciclos menstruales, tus embarazos, o el cese definitivo de la menstruación con la llegada de la menopausia. Por ello, con la intención de que te sientas más relajada y confiada en el momento de la exploración, te informamos de los beneficios de ello para tu salud.
tipos de exploración ginecológica
- Revisión de genitales externos: Su visualización puede dar a conocer el estado de nuestros genitales y si existe algún tipo de patología como vulvovaginitis, úlceras vulvares, atrofia vulvar, o verrugas entre otras.
- Espectroscopia: A través de la introducción de un espéculo en la vagina (aparato de plástico que permite abrir la vagina), se pueden observar las paredes de la vagina, obtener una visión del cérvix, del estado del flujo o del tipo de sangrado que se presenta.
- Ecografía: La ecografía ginecológica es una técnica de exploración no invasiva que, mediante ultrasonidos, permite visualizar los genitales internos de la mujer.
- Tacto vaginal: Consiste en la introducción de los dedos índice y corazón de la mano en la vagina y es necesaria para poder conocer tamaño, presencia de tumores o malformaciones en útero, ovarios y trompas.
- Exploración mamaria: Es de suma importancia dentro de la cita con el ginecólogo para valorar si hay problemas dentro de la mama como tumores o nódulos, lesiones en la piel, y otras alteraciones de las mamas. Tu médico determinará si es necesario una mamografía o ecografía de mamas de acuerdo a esta exploración.
- Citología: Se realiza un suave raspado en el cuello del útero para analizar las células de la vagina con la intención de detectar lo antes posible alguna anomalía o incluso la existencia de un cáncer de cuello de útero que muchas veces se asocia a una infección causada por el virus del papiloma humano.
Recuerda que la visita al ginecólogo debe realizarse al menos una vez al año y de por vida, aunque no tengas actividad sexual.